-Ezra espera aqui ire a ver si puedo encontrar algo para curarte las heridas, no quiero que se te infecten- genial, hasta hablaba con un cachorro que me acababa de encontrar moribundo y ni siquiera sabía si me entendía
Entré en el cuarto de baño, y abrí un armario en el había alcohol para desinfectar y vendas.
-¡Ezra ven!
Vi como se acercaba hacia mi un poco indecisa-Ezra ven, esto te va a escocer un poco pero es para que no se te infecte.
Me agaché y la cgí, la puse encima de la tapa del wc- bien ahora quedate quieta- mientras me giraba y cogía un poco de algodón y lo empapaba de alcohol- ahora estate quieta , vale... pasara pronto te lo prometo
Le empecé a curar las heridas y vi como se calmaba mientras le quitaba la sangre y desinfectaba las heridas mientras se las vendaba
-Bien, ya esta- la baje de la tapa-ahora sigueme te diré donde podrás dormir.
Subimos las escaleras que conducían a mi habitación, los cuartos de baño y otras habitaciones que no había abierto todavía.
Mi habitación tenía una gran puerta de madera de roble, marrón oscuro y con un picaporte dorado. La abrí y allí se encontraba mi cama con el cabezal de madera y en el había colgado unas cuantas fotos por un cordel, al lado había una mesita y una pequeña estantería con unos cuantos libros. Detrás había una gran ventana que daba a la playa y por donde entraba la brisa y se escuchaba el sonido de las ola
-Bien tu dormiras aquí - cogiendo un cogín y poniendolo al lado de mi cama-y yo aqui arriba vale
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