Cuando ví que se marcharon, empecé a nadar hasta la orilla, cuendo no hubo nadie empecé a salir, mi cola y mi aspecto cambiaron ya no era una sirena si no una chica normal con el pelo un poco más corto, y donde había estado mi cola ahora aparecían unas piernas con unos pantalones cortos baqueros y unas combers moradas con una camiseta morada básica. Seguí caminando por la playa y mirando a mi alrededor, todavía me costaba asimilar que estaba en la superficie y que tendría que tener cuidado con algunas cosas como el agua en grandes cantidades por ejemplo, mientras pensaba en todo esto llegué a unas escaleras que daban a un paseo, subí y seguí caminando para ir conociendo esta pueblo y sus habitantes. Me paré en una tienda de ropa que había y me acerqué al escaparate, había como un muñeco de plástico con ropa puesta encima y muchos collares. Seguí circulando, cada vez esta calle era más impresionante.
-¡He cuidado!-dijo una voz a mi espalada
Me giré y tuve que apartarme era un chico rubio montado en un trozo de plástico duro con cuatro ruedas, venía hacia mi con mucha velocidad.
Cuando pasó por mi lado alcancé a decirle -¡Mira por donde vas!- y me fui corriendo no quería, tener una pelea mi primer día en la superficie.
Seguí avanzando hasta que llegué a un barrio muy lujoso, había casas muy grandes con ventanales enormes, verjas negras igual de altas, grandes jardines con fuentes y en la misma puerta unos frandes coches muy lujosos. Me acerqué a un coche que me llamó la atención era un descapotable gris, muy grande y por dentro de cuero blanco, se vé que su dueño lu cuidaba muy bien para que estubiera así de nuevo.
-¿Te gusta mi coche?-dijo alguien detrás de mi
Me giré y hay estaban los tres chicos de la playa, y el que me había hablado era el que había salvado. Me quedé mirando y ellos se quedaron con la boca abierta.
-¿tengo algo en la cara, para qué me mireis así?-dije poniendo voz de estar un poco molesta, pero ellos no se movieron ni respondieron-¡os he hecho una pregunta!o es que no teneis lengua
-Si perdona, es que hemos visto a un ángel- dijo el moreno riendose
-Me tomas el pelo-dije poniendo cara de enfadada
-No le hagas caso es un poco bromista mi amigo Carlos- dijo Javi con una sonrisa que me dejó sin aire
-Pues no me gustan sus bromas-dije con el ceño fruncido
-Anda, si solo era para animar el ambiente- dijo riendose Carlos que depués le siguieron Javi y otro chico que no conocía
Me fui alejando, no quería darle una torta a Carlos y menos delante de Javi y el otro. Hoy como decían ¡ he que se va!. Genial como si no tuviera ya mis propios problemas. Se acercaron corriendo los tres, se ve que no los iba a poder despistar tan facilmente.
-¡Hey espera! perdona no queriamos comportarnos así- ``genial esto iba a ser interesate -_-´ ´´
-Que quereis ahora-dije un poco molesta
-Volver a empezar-dijo Carlos
-Empezar el que,¿tus bromas? paso
-No en serio, sin bromas ni nada por el estilo
Mmmmm........ no sabía si fiarme de ellos, pero no conocía a nadie y estos tres eran mejor que nada
-De acuerdo, pero si escucho una broma me largo.
-UUhhhhhhhh.......... eres dura de pelar ehhhh- le miré con cara de pocos amigos e hice ademán de irme, pero alguien me cogió de la muñeca, era Javi y me estaba mirando con una sonrisa, ``Dios que guapo es´´
-Yo soy Javi, el bromista es Carlos y el chico este tan callado es Jose
-Encantada, yo soy María y acabo de llegar al pueblo
-Pues ya nos tienes como tus guías personales- dijo Jose guiñandome el ojo
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